De lectura obligada:¿Por qué Adebayor? ¿Por qué no Morata?

¿Por qué Adebayor? ¿Por qué no Morata?

23/07/11 - 23:36

La exhibición de los jóvenes españoles frente a Serbia -también favorecida por la incompetencia defensiva del equipo balcánico- confirma el espectacular momento de nuestro fútbol. Con independencia de los resultados, que han sido extraordinarios en la selección absoluta y en la sub 21, resulta asombrosa la cantidad de magníficos jugadores que aparecen en todas las categorías. En la sub 19, también. El partidazo de Morata - hat trick en medio de una infinidad de ocasiones-, Sarabia y el deslumbrante Deulofeu no ocultan la realidad de un equipo bien construido desde la defensa. Es una selección donde todos juegan bien, tanto que obliga a preguntarse por las resistencias que encuentran en el mercado nacional, donde invariablemente se valora mejor a futbolistas que, casi siempre, demuestran menos condiciones que los españoles.

A eso se refirió Del Bosque en el aniversario de la conquista de la Copa del Mundo. Se quejó de un cierto desdén por los jóvenes jugadores españoles y de que el mercado no refleje su categoría. Su queja tiene sentido porque el fútbol español dispone de una cantidad infrecuente de excelentes futbolistas, de jugadores que conocen el oficio a edades tempranas y que están en una disposición inmediata de funcionar en Primera División. Gente como Dani Carvajal �un lateral que defiende con intensidad y ataca con inteligencia- o Rubén Pardo �uno responde perfectamente a las características de los magníficos centrocampistas españoles actuales- merecen las oportunidades que tantas veces se conceden a jugadores de medio pelo, promovidos por las curiosas reglas del mercado, donde los méritos valen menos que el poder de los agentes.

El caso de Morata dice mucho de la situación actual. En un mundo perfecto sería el tipo de jugador que el Madrid promocionaría en el primer equipo, con cuidado y esperanza, midiendo los tiempos para haciéndole saber que es importante. Todavía es un chico de 18 años, con todo lo que eso significa de inmadurez, pero sus condiciones como delantero centro son indiscutibles. Tiene una planta impresionante, una potencia infrecuente para su edad, una facilidad para conducir la pelota impropia en los delanteros centro y un creciente apetito por el gol. Todavía no genera el porcentaje necesario de goles por ocasiones alcanzadas, pero ese asunto sólo se arregla con la edad y con los partidos importantes. Cualquier equipo estaría como loco por ficharle. Sin embargo, todo indica que el Madrid lo destinará irremediablemente a su segundo equipo, en la Segunda B, donde el riesgo de empantanarse es evidente.

Mourinho ha declarado que le falta el último delantero en un equipo que cuenta con Benzema, Higuaín y Cristiano Ronaldo - solución para cualquier problema en el frente de ataque- y no se descarta el regreso de Adebayor, antes de que aterrice Neymar. Este paisaje coloca a Morata en una situación muy delicada. Aunque ha renovado su contrato con el club, su situación le coloca claramente fuera de la órbita del primer equipo. Sarabia ha resuelto este problema con su traspaso al Getafe, equipo lanzadera que le permite pensar en un destino parecido al de Mata, De la Red o Parejo, espléndidos jugadores que no encontraron en el Madrid la confianza que se concedió a muchos centrocampistas extranjeros, muchos de ellos claramente inferiores a ellos. Desde Gravesen hasta aquí, la lista es larga y decepcionante para las jóvenes promesas del Madrid.

No hay una apuesta contundente, o no hay apuesta, sin más, por unos jugadores que demuestran una superioridad incuestionable en las distintas selecciones españolas. No es difícil imaginar lo que sucedería en los despachos de los equipos españoles si estas exhibiciones las produjeran las selecciones de Serbia, Alemania o Francia, por hablar de tres países con una gran tradición en la formación de futbolistas. Serían la comidilla del mercado de verano y el objetivo de algunos de los clubes más poderosos de la Liga. Y con razón, porque son jugadores excelentes.

¿No hay una posibilidad para Morata en el Madrid? ¿Hasta qué punto es necesario el reingreso de Adebayor, lo que supone un muro infranqueable para el joven delantero internacional? Morata dispone de unas cualidades que harían felices a cualquier entrenador, pero necesita un equipo y en una competición que le exijan progresar y no caer en la melancolía. El Madrid parece que no le ofrece esta posibilidad. Tampoco se la ofreció a Sarabia, ni seguramente a Carvajal. Mientras tanto, llegan jugadores de aquí y allá para las posiciones traseras de la plantilla, del 17 al 25. Para ellos hay buenos contratos y oportunidades, las que no se conceden a unos jóvenes que en cada torneo internacional demuestran que son los mejores de Europa.

http://www.marca.com/2011/07/23/opinion/firmas/santiago_segurola/1311457010.html?a=77491d9fecadd7880a7e04911b439adc&t=1311502634